(Economía de los Mil Demonios, 27/10/2011)
Ok, todos estamos indignados porque Las buenas intenciones estaba puesta solamente en horarios inaccesibles. Todos hemos visto la movida mediática que pudieron armar los promotores de la película. Y no es para menos. Cuantiosos esfuerzos se han aplicado para que esa película se realice.
Pero sincerémonos. ¿Cuántas la hemos ido a ver? Y por encima de eso, ¿cuántos realmente la queremos ir a ver? De los que la van a ir a ver al cine, ¿cuántos la quieren ver porque la quieren ver y cuántos la van a ver por alguna otra razón (para decir que la vieron, porque es peruana, porque conocen a alguien involucrado con la película, por el escándalo de estos días, etc, etc)? …